La adopción de perros en edades avanzadas revela un tapiz de beneficios tanto para los animales como para los adoptantes. Al abrir las puertas de nuestros hogares y nuestros corazones a estos seres desfavorecidos, les brindamos una segunda oportunidad para experimentar la alegría y la seguridad que merecen. Además, esta elección valiente y compasiva fomenta un vínculo profundo y auténtico. Estos viejitos poseen una gratitud y devoción especiales e incalculables hacia aquellos que les brindan un hogar en sus últimos años de vida. Indudablemente, al evitar su adopción nos privamos de una experiencia enriquecedora y transformadora. Con su sabiduría acumulada y su capacidad de amar incondicionalmente, pueden enseñarnos valiosas lecciones sobre el paso del tiempo, la aceptación y el cuidado de otros en situaciones de vulnerabilidad. Al abrir nuestras vidas a estos seres en sus últimos años, nos abrimos a una oportunidad de crecimiento personal y conexión emocional profunda.
Durante esta etapa final de su vida el perro experimenta cambios de comportamiento, duerme mucho más e incluso puede sufrir enfermedades por su débil sistema inmunologico si no le prestamos atención. Nuestra misión es intentar paliar los efectos de la edad teniendo en cuentra tres factores básicos: ánimo, alimentación y dolor.
La alimentación del perro anciano, mayor o senior es sumamente importante, tiene necesidades distintas a las de un perro adulto.
El perro anciano duerme más horas que un perro adulto, pero que esto no te confunda: necesita pasear y socializar como cualquier otro perro. Para ello es importante que adaptemos el ejercicio físico a tu situación concreta ya que los perros que son muy mayores tienen una actividad física reducida, pero que igualmente debe mantenerse.
El perro anciano puede cambiar de comportamiento mostrándose más independiente, apegado e incluso podemos apreciar que llora cuando nos vamos de casa: tiene unas necesidades de afecto mayores.
Es normal que el perro anciano cambie de comportamiento o actitud dentro del hogar, quizás notas que te sigue de forma más exagerada: puede ser consecuencia de carencias en sus sentidos, tienen miedo de estar solos. Te recomendamos que les ofrezcas confianza y que siempre cuentes con ellos para ir a la cocina o al salón, te lo agradecerán.
Los perros mayores o ancianos pueden sufrir todo tipo de enfermedades propias del paso del tiempo. Es importante que dediques cada día un rato a palpar la piel de tu perro y a acariciarlo para descubrir si tiene puntos de dolor, nadie mejor que tu puede hacerlo.